En este contexto de sostenibilidad, no se ha dejado ningún detalle al azar. El resultado es un excelente equilibrio entre las distintas partes del edificio: desde los volúmenes, pasando por el estudio de la distribución funcional de los interiores y el mobiliario, hasta el diseño de la zona exterior, incluidos los acabados y los revestimientos. Para ello, Cotto d’Este participó en el proyecto con la calidad de su oferta: el volumen de entrada de la casa y algunas partes de las paredes ciegas de la planta baja están revestidos con placas de gres porcelánico Kerlite 3Plus Buxy, tonos Noisette, para embellecer las fachadas.
Kerlite Buxy es un material ligero, versátil y resistente gracias a su grosor reducido (3,5 mm) y al refuerzo de fibra de vidrio. Estéticamente es muy fascinante: su particular diseño gráfico puntiforme y su especial combinación de colores se inspiran en una piedra originaria de la Borgoña francesa de indudable encanto. La sobriedad y la belleza de las piedras naturales se ven notablemente realzadas gracias a este revestimiento.