Cuatro hectáreas de terreno circundado por una pineda, un espacio verde a solo 15 minutos de la ciudad de Ibiza. Aquí, una pareja de arquitectos —Axel Schoenert y Zsofia Varnagy— ha elegido construir su villa-refugio.
Cotto d’Este se encuentra presente en este espacio elegante y exclusivo con sus valiosas superficies, elegidas para crear los acabados de la zona exterior en torno a la piscina y algunos planos horizontales del interior.
El estilo del espacio conlleva el uso de tonos y formas capaces de entrar en profunda sintonía con la naturaleza del entorno, los colores elegidos para conseguirlo son cálidos y neutros, como el gris topo, el gris claro y el beis. De igual modo, con los materiales utilizados —madera, piedra y cristal— se ha intentado reflejar y respetar la atmósfera de la isla.
Photo credits: Luc Boegly
Siempre con este enfoque, los acabados de Cotto d’Este seleccionados han sido los de la colección CLUNY, que retoma la piedra de Borgoña en cinco refinados colores: desde el gris antracita hasta un luminoso color magnolia.
Elegida en la versión Argerot Layè, Cluny se ha utilizado en el formato 75 × 75 cm para el pavimento que rodea la gran piscina exterior. El acabado Layé, ideal para los exteriores, permite un agarre perfecto incluso en mojado. En el interior, por su parte, los arquitectos han optado por Argerot Sablé, una superficie suave al tacto y homogénea a la vista, más adecuada para los interiores.