Bosco Verticale, uno de los 50 rascacielos más icónicos de los últimos 50 años. Y su parte externa lleva la firma de Cotto d’Este.

Nuevo reconocimiento del «Council on Tall Buildings and Urban Habitat», organización sin ánimo de lucro en el ámbito del diseño urbano sostenible, que ya en 2015 había señalado las torres verdes de Porta Nuova como los edificios más bonitos del mundo. Diseñados por Boeri Studio (Stefano Boeri, Gianandrea Barreca, Giovanni La Varra), han sido realizados con superficies cerámicas de Panariagroup.

En la lista de los rascacielos que constituyen un símbolo de los últimos 50 años destaca Bosco Verticale, torres realizadas en 2014, en Milán, y protagonistas de uno de los proyectos más radicales de recalificación urbana de la ciudad. El complejo de rascacielos, diseñado y proyectado por Boeri Studio (Stefano Boeri, Gianandrea Barreca, Giovanni La Varra) y construido y gestionado por Coima, está compuesto por dos torres —de 110 y 76 metros de altura— cuyas fachadas albergan 711 árboles, 5000 arbustos de grandes dimensiones y 15000 plantas de hoja perenne y caduca hasta recubrir un área equivalente a dos hectáreas de forestación.

Señalado entre los edificios que más han contribuido a aportar valor al territorio y a la comunidad urbana, Bosco Verticale ha representado, desde su realización, un modelo para todos los edificios proyectados posteriormente en los que la vegetación se integra en el cuerpo arquitectónico.

Diseño innovador y experimental, desde sus primeras fases de proyecto, Bosco Verticale ha constituido un auténtico reto que Cotto d’Este, junto a Panariagroup, ha sabido afrontar ocupándose del revestimiento externo. La fachada ventilada, de hecho, ha sido realizada con baldosas personalizadas de gres porcelánico de grosor aumentado de 14 mm, fruto de una tecnología de producción única: prensado 3 veces y cocido a 1230 °C durante más de 90 minutos, el producto tiene características, prestaciones técnicas y estéticas superiores. El material cerámico constituye, de este modo, parte integrante del resultado estético del edificio gracias a su estrecha relación con su alma viva: la vegetación.